Tecnocracia. Burocracia Política y Sindical. Empresarios Políticos y Gremiales. Adaptables. Reversibles
Como sociedad hemos asumido la existencia de dirigentes políticos, empresariales, sindicales y sociales de las más diversas instituciones públicas o privadas, corporaciones y asociaciones libres de la democracia, que se aburguesan, burocratizan o maniobran, para propios beneficios o actividades ajenas y nocivas a la razón de ser de los cargos que ocupan y las instituciones que dirigen.
La lucha democrática que afrontamos implica la capacidad de generar consensos y aglutinar voluntades en Proyectos, programas y hombres que se dirimen en una contienda electoral. Cada alianza implica admitir e incorporar ideas diferentes y resignar propias. Admitir e incorporar personas que electoralmente representan esas ideas y resignar las propias.
Cuánto podemos resignar para sumar votos hacia un triunfo electoral sin que ello no signifique ganar para llevar a cabo un Proyecto ajeno o que nos gobierne una persona que no nos exprese?. Ganar a lo Pirro.
La contienda es en todos los frentes y con todas las herramientas que ofrece la democracia. Existe un objetivo principal con un ENEMIGO demasiado grande, casi excluyente, como para distraer energías o recursos en contradicciones menores.
Pero hay discusiones que no se pueden postergar indefinidamente sin correr el riesgo de ganar terreno para atrás. De entregar las Banderas. De ser víctimas de la ingenuidad.
Si decimos que son tan poderosos, cómo no suponer que pueden penetrar nuestras filas y coparnos de adentro.
Sin paranoias. Sin obsecuencias. Alertas. Protagonistas. Sin conceder espacios en ningún sector ni nivel.
Firme, decidida y oportunamente. Así tiene que ser la marcha. Paso a paso. Cada cosa a su tiempo y atendiendo a todas.
Hoy, corporaciones hegemónicas mediáticas y económicas con su servidumbre política. El resto, ya llegará. En su medida y armoniosamente.
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